HomeAGUSTINOS RECOLECTOSLos Agustinos Recoletos de Brasil ceden el Seminario San Agustín para el combate contra el COVID -19

Los Agustinos Recoletos de Brasil ceden el Seminario San Agustín para el combate contra el COVID -19

La Provincia de Santo Tomás de Villanueva de la Orden de los Agustinos Recoletos, puso a disposición de la Secretaría Municipal de la salud de Maringá, en el estado brasileño de Paraná (Brasil), el edificio del Seminario San Agustín para que sirva de descanso para el equipo médico que lucha contra la pandemia.

La estructura cuenta con 24 habitaciones dobles, además de un amplio refectorio, estacionamiento privado y áreas verdes.

Sobre ello, el prior provincial, fray Miguel Ángel Hernández, declaró: “Estamos contentos de que los sanitarios usen este edificio. Es una alegría poder contribuir en este momento de crisis humanitaria”, sostuvo.

En él se hospedarán los profesionales de la salud que necesitan descansar y de este modo ya no regresar hasta sus casas. Se trata de los agentes del servicio sanitario de la Santa Casa de Maringá, que consta de 32 profesionales, entre los que se cuentan médicos, enfermeros y técnicos.

Ellos están en primera fila en el combate en contra el coronavirus y es recomendable que eviten en contacto con los niños y ancianos. Por ello la necesidad un lugar especial para reposo y aislamiento.

Esta medida surge de la voluntad de los frailes por ayudar a combatir esta pandemia que azota al mundo, sobre ello, fray Javier Tello, primer consejero, manifestó: “Consulté al prior provincial, fray Miguel Ángel Hernández, sobre la petición de poder prestar el inmueble. Fr. Miguel no dudó en poner a disposición de los sanitarios nuestros espacios en este momento tan difícil”.

Igualmente, confesó que es “un gesto de solidaridad de nuestra parte para ayudar a amortiguar los efectos de la pandemia”.

Hay que manifestar que en esa misma ciudad varias instituciones católicas también se han puesto al servicio de los sanitarios cediendo sus instalaciones; por ejemplo, el Seminario Arquidiocesano, quien también prestó 36 habitaciones y otras instituciones religiosas como parroquias y congregaciones han hecho lo mismo.

A pesar de que el presidente de Brasil aún no declara la emergencia sanitaria, la sociedad civil hace un esfuerzo colectivo para aliviar los sistemas de salud y dar soporte a los profesionales.

Igualmente, cada vez más hoteles se ofrecen voluntariamente para recibir a los profesionales de la salud en sus instalaciones con el fin de evitar la expansión del virus. Sin duda se trata de gestos concretos de solidaridad que hacen la diferencia.