El profesor Augusto Bocanegra Gálvez sugiere que las autoridades del distrito de Tacabamba coloquen avisos informativos y también orienten a los visitantes sobre los accesos y características de la catarata El Cóndac, pero los excursionistas también deben ser prudentes para evitar que más personas pierdan la vida en el lugar turístico, como ha ocurrido recientemente con un estudiante chotano que murió ahogado.
El también escritor tacabambino explicó que los accesos y la catarata no son riesgosos; el peligro está en la laguna en la que cae con fuerza un gran torrente desde lo alto y genera un remolino, que arrastra y sumerge a quienes nadan en su entorno. Calculó que la laguna tiene una profundidad de hasta 15 metros y en el interior existen grietas y cavernas.
“Cerca de una decena de personas ha perdido la vida por desconocimiento o imprudencia. No es culpa de la naturaleza, la naturaleza nos brinda su belleza, su atractivo; pero hay que tener cuidado, no debemos acercarnos demasiado a la zona de atracción generada por la caída del agua. Los visitantes por lo menos deben informarse bien sobre la histórica catarata El Cóndac”, manifestó.
Tratamiento de aguas residuales
En otro momento, Bocanegra Gálvez también consideró que los desagües de la ciudad que desembocan en el río Tacabamba no llegan hasta la mencionada catarata. Mencionó que las aguas residuales son purificadas en un cañón de aproximadamente 2 kilómetros de largo; sin embargo concordó en que lo correcto es que las aguas servidas sean procesadas en una planta de tratamiento y no discurran al río.
