De manera figurada, José López Coronado manifestó que ha soñado que Chota era un paradisiaco páramo, con coloridas campiñas naturales, ríos y cielo diáfanos; así como con una ciudad ordenada, limpia, con calles bien pavimentadas, con el servicio de agua potable durante todo el día; que la Universidad Nacional Autónoma no es una más del montón; que su gente era culta y unida, que cumplía sus deberes y exigía sus derechos; y que sus autoridades trabajaban de manera transparente por el desarrollo.
“Soñé que los ríos San Mateo, Colpamayo y Chotano tenía caudales limpios y con pececitos, como eran antes. Que la ciudad era ordenada, tranquila, rodeada de árboles, flores y praderas naturales, lluvias copiosas, con un cielo espléndido y avecillas. Vi que los habitantes del campo tenían sus viviendas con todos sus servicios y sus carreteras eran las bicapas que se anuncian; soné que Chota era un paraíso y no un ambiente que ya realmente desespera”, manifestó.
López Coronado agregó que en su sueño también vio que la población y las autoridades trabajan de manera transparente y conjunta por el desarrollo de Chota; que las bibliotecas estaban pobladas de lectores de todas las edades; que los niños, jóvenes, adultos y adultos mayores tenían lugares de sano esparcimiento; que las Rondas Campesinas eran una sola; que no había dos frentes de defensa ni dos SUTEP.
“Ese sueño he tenido y lo comparto con ustedes porque esa es la visión que tenemos y queremos para nuestro pueblo. Por eso es que quisiéramos que todos nos unamos; que nuestras diferencias sean superadas por la unión; que todos nos sintamos orgullosos de nuestro pueblo”, expresó el poeta chotano.
Agregó que también ha soñado que la Unidad de Gestión Educativa Local no está enredada tanto en el papeleo administrativo, sino hace más efectivo el trabajo en las aulas para que los escolares estén más preparado para encarar el presente con visión y proyección al futuro.
